Las vacaciones se huelen...

El calor aprieta ya. Qué haríamos sin aire acondicionado. ¿A que os
recuerda? ¿No os recuerda a esa brisa que sopla a 3.000 m, enfriada por
el hielo y los neveros, cuando os refresca la cara en la montaña? Je,
igualito.

El otro dia hablaba con mi novia de lo facil que es embarcarse en una
aventura, una experiencia. A la mayoría de la gente, el simple hecho de
dormir una noche al raso, en la playa por ejemplo, con una manta o saco
fino, ya es un aventurón de narices. Que fácil es. Y que poco lo
hacemos... La vida es monótona porque uno quiere.

La Bitácora de La Montaña es Mi Reino...

Nunca pensé que a mi edad acabaría teniendo un diario, algo que siempre he encontrado pueril. Pero la verdad es que reconozco que, a parte de los diarios o cartas que escribía cuando era niño, cuando empecé a realizar viajes, salidas, expediciones (o como lo querais llamar) a la alta montaña me compré un bloc de notas en blanco para escribir mis pensamientos mientras me hallaba inmerso en aquellos impactantes primeros espectáculos sobrecogedores para mi alma.

La verdad es que últimamente todo este mundo de los blogs me ha animado a retomar esa bonita costumbre que es escribir tus pensamientos, sensaciones, ideas, opiniones... y además dejar que los visitantes de esta página participen. Y eso que al principio parecía una moda pija y pasajera, se convierte ahora en un atractivo más de esta página. Espero que os guste, y que participeis.

Os doy la bienvenida, navegantes.